¿SUSPENDEMOS NUESTRA BODA?

¿Suspendemos nuestra boda? Esta es la gran pregunta que anida en las cabecitas de todas las parejas que fijaron la fecha de su boda para este fatídico año 2020. Y es que incluso las parejas que se casan en octubre de este año tienen dudas, no todos pero si que algunas me lo han hecho saber.

¿Podemos hablar de un año en blanco para los fotógrafos? Pues teniendo en cuenta que en España el confinamiento oficial comenzó el 16 de marzo y que hasta esa fecha pocos se habían casado, es posible que ocurra eso porque se trata de concentraciones de personas muy grandes, y el riesgo es mayor. Además todo dependerá de como de ‘en serio’ nos lo tomemos los españoles con el uso de la mascarilla y el respeto por la distancia de seguridad durante la desescalada. Hasta ahora las parejas que les ha pillado muy proto, yo tenía mi primera boda este año el 21 de marzo y los pobres la aplazaron a mitad de mayo, pero claro nadie se imaginaba esta catástrofe sanitaria y económica, han tenido que pasarla a agosto. Por otro lado tengo parejas con fechas en septiembre que han decidido directamente cambiar la boda a 2021 y algunos de junio todavía aguantan pero con plan B por si acaso. ¿Alguien ve factible celebrar una boda en junio sin ningún tipo de restricción? ¿Y en Julio? ¿Y en agosto? Nadie lo sabe, todos vamos sobre la marcha, con el día a día, no nos hemos cortado el pelo hasta que nos han dejado y ahora que podemos hay lista de espera. Pues así va a ser con todo. Y es que al final una boda es una celebración muy esperada, es un acontecimiento muy importante en la vida de cada pareja y de cada familia implicada, y no se puede ir a una boda y no bailar agarrados, y esquivarse en la pista de baile y no lanzar al novio al aire, y no besarse, ni abrazarse y separar a los invitados tal que el mas lejano ni con un megáfono le van a oir el ¡vivan los nivios!

Conclusión,  si yo me casara este año aplazaría la boda para 2021. Y quiero una boda como Dios manda, con todos los invitados en fila haciendo el paquito el chocolatero. Eso si os espero en la esquina, al salir del supermercado, estaré sentado en el suelo esperando que me eches unas monedas o me dejes algo de comida.